- Una veintena de policías militares retuvo al líder opositor y a varias decenas de diputados durante casi una hora
- Guaidó fue reelegido como presidente del Parlamento de Venezuela el pasado domingo en una sesión paralela
Guaidó y varias decenas de diputados opositores entran por la fuerza en la Asamblea Nacional
La mayoría opositora del Parlamento venezolano ha investido de nuevo este martes a Juan Guaidó como presidente interino de Venezuela, tras una accidentada sesión en la que los diputados han tenido que abrirse paso hacia el Palacio Legislativo a la fuerza. Esta decisión ratifica el desafío de la oposición al presidente venezolano, Nicolás Maduro, que gobierna desde 2013 y al que buena parte de la comunidad internacional, con Estados Unidos a la cabeza, le pide que se aparte del poder y convoque «elecciones libres».
La caótica jornada que ha vivido el Parlamento de Venezuela este martes ha estado marcada por la violencia y el enfrentamiento entre dos directivas que se disputan el liderazgo del único poder que controla la oposición en el país.
Guaidó y varias decenas de diputados que le respaldan como presidente de la Asamblea Nacional de Venezuela (Parlamento) han entrado en el Palacio Legislativo después de haber sido retenidos en la entrada durante casi una hora por un cordón de la policía militarizada, con quienes han mantenido un tenso enfrentamiento mientras que se desarrollaba dentro una sesión encabezada por el diputado Luis Parra.
«Ellos tratan de agredir al pueblo de Venezuela, no a Juan Guaidó. Nuevamente la dictadura bloquea, obstruye, agrede”, ha dicho a los medios Guaidó, que fue reelegido el pasado domingo como presidente del Parlamento de Venezuela y que ha subrayado que la sesión liderada por Parra no tenía validez puesto que se llevó a cabo sin el quorum reglamentario de 84 diputados.
Entramos al hemiciclo. Aún quedan diputados resteados siendo agredidos a las afueras por las fuerzas represivas de la dictadura.
La segunda sesión encabezada por Guaidó
Los opositores se han logrado instalar finalmente en el pleno, no sin una nueva refriega con la policía militarizada, y han dado comienzo a otra sesión ordinaria, en la que no han estado presentes Parra ni ningún otro miembro de su directiva ni la bancada chavista.
Al inicio de la sesión se ha producido un corte eléctrico en el Palacio Legislativo que tampoco ha impedido que la sesión continuara a media luz y con los altavoces y los micrófonos apagados.
A la salida del Palacio Legislativo, una vez que Guaidó ha vuelto a ser investido como presidente interino del país, las fuerzas de seguridad venezolanas han lanzado gases lacrimógenos contra el líder opositor y contra los diputados que lo apoyan, según ha informado Reuters y medios locales.
Además, varios periodistas han sido golpeados o han sufrido algún robo mientras daban cobertura a la primera sesión de la Asamblea Nacional, según ha informado el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Prensa (SNTP).
«A esta hora, colectivos armados atacan, roban y golpean a periodistas», entre ellos Francesco Manetto, del periódico español El País, y Manuel Cobela, del canal privado Venevisión. «Les robaron sus equipos y documentos personales», ha indicado en Twitter el SNTP, que ha denunciado también que al menos otros cinco trabajadores de la prensa fueron agredidos por civiles armados afectos al Gobierno de Nicolás Maduro.
Caravana con varias decenas de diputados antichavistas
Desde primera hora de este martes, Guaidó ha liderado una caravana con varias decenas de diputados para intentar entrar en la Asamblea Nacional dos días después de que la policía militarizada impidiera su paso a la Cámara.
Se han reunido en la sede en Caracas del partido Acción Democrática y luego han abordado autobuses y vehículos privados para dirigirse al Parlamento, donde una directiva liderada por el legislador Luis Parra, elegida el domingo pasado con el respaldo del chavismo, convocó a sesiones.
Minutos después del comienzo de la sesión, un grupo de diputados opositores entró en el salón gritando que el debate es ilegítimo puesto que no existe, han dicho, el quórum reglamentario según el cual se requieren 84 diputados para empezar las discusiones.
«No hay quorum, esto es ilegítimo», repetía a gritos la diputada Manuela Bolívar desde el palco de prensa del Palacio Federal Legislativo, mientras que el grupo de chavistas la observaba desde abajo y se mofaban de la situación.
Después, el pequeño grupo opositor abandonó el hemiciclo de sesiones tras ser callado por los aplausos de los oficialistas que no detuvieron el debate y empezaron con el primer punto de su agenda: la escasez de combustible.