FUNDACIÓN TRES CULTURAS
Don Felipe ha presidido este lunes la inauguración del Wocmes, un congreso sobre Oriente Próximo que reúne en la ciudad a tres mil especialistas.
El Rey Felipe VI ha destacado este lunes en Sevilla durante la inauguración del Wocmes, un congreso sobre Oriente Próximo que reúne a unos 3.000 especialistas, la vocación de la capital de Andalucía como «tierra de encuentro» y «diálogo entre culturas».
El Rey ha inaugurado en Sevilla el Congreso Mundial Wocmes, que reúne a 3.000 investigadores de 90 países. Felipe VI ha abogado por la cooperación con el Mediterráneo y ha subrayado que «la estabilidad y la prosperidad» europeas «están y siempre han estado estrechamente vinculadas al destino» del norte de África y de Oriente Medio.
Don Felipe ha sostenido que el Mediterráneo «debe ser el espacio compartido de paz, prosperidad y estabilidad que nuestros ciudadanos anhelan». El monarca ha recordado que el diálogo entre las dos orillas del Mediterráneo constituye «una relación estratégica» entre países vecinos que afrontan «muchas preocupaciones comunes, desafíos y amenazas, con la voluntad, la necesidad y la determinación de vencerlos» mediante una «estrecha cooperación».
Ha recordado que «Sevilla, Andalucía y España entera son tierra de encuentro, que sabe combinar tradición y vocación por el intercambio de ideas con el diálogo entre culturas y la construcción de puentes», por lo que «sin duda», ha añadido, el legado cultural e histórico español «nos predispone para realizar valiosas aportaciones al conocimiento, a la sabiduría común y al entendimiento entre comunidades y personas de distintas procedencias y tradiciones».
Don Felipe ha valorado el esfuerzo realizado por el Reino de Marruecos y por la Junta de Andalucía por impulsar la Fundación Tres Culturas, cuya sede, que reutiliza el antiguo pabellón marroquí de la Expo 92 de Sevilla, ha sido el escenario de la inauguración de este congreso.
Al acto han asistido también la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Daz, y cuatro miembros demás del Gobierno andaluz; los ministros de Cultura de España y de Marruecos, José Guirado y Mohammed Laaraj; el secretario de Estado de Asuntos Exteriores, Fernando Valenzuela; el presidente del Parlamento de Andalucía, Juan Pablo Durán; así como los embajadores de España en Rabat, Ricardo Díez-Hochleitner y de Marruecos en España, Karina Benyaich.
En la quinta edición del Wocmes, cuyo lema es: «Tus raíces. Tu herencia. Conocimiento que une», participan unos tres mil especialistas de Oriente Próximo y Norte de África que celebrarán más de 500 sesiones de trabajo.
Los debates se articularán en 25 áreas temáticas, entre ellas, las referidas al análisis y resolución de conflictos; economía; estudios de género; medios de comunicación; migración o el problema del agua. Las anteriores ediciones del WOCMES se celebraron en Mainz (Alemania) en 2002; Amman (Jordania) en 2006; Barcelona (España) en 2010; y Ankara (Turquía) en 2014.

El congreso se acompañará de una exposición bibliográfica, una muestra de cine y una programación cultural paralela que incluye muestras y conciertos.
«Sevilla, Andalucía, España entera son tierra de encuentro que sabe combinar tradición y vocación por el intercambio de ideas con el diálogo entre culturas y la construcción de puentes», señaló Don Felipe en el discurso final de la inauguración de este congreso internacional, que por segunda vez se celebra en España.
Al acto inaugural asistieron numerosas autoridades, entre ellas, la presidenta de la Junta, Susana Díaz; el ministro de Cultura y Deporte, José Guirao; el alcalde de Sevilla, Juan Espadas; el delegado del Gobierno, Alfonso Rodríguez Gómez de Celis; y el consejero del Rey de Marruecos y presidente de la Fundación Tres Culturas, André Azoulay.
Es precisamente la Fundación Tres Culturas quien organiza este congreso, en cuya sede se celebró la inauguración, en la que el Rey realizó, en un discurso mayoritariamente en inglés, una defensa de la vocación mediterránea de España, así como de los lazos culturales, científicos y de amistad que mantiene con los países de ambas orillas del, llamado en época romana, «mare nostrum».
En ese sentido, señaló a la Fundación Tres Culturas, creada por la Junta de Andalucía y el Gobierno de Marruecos, como un «excelente ejemplo de lo que marroquíes y españoles podemos alcanzar cuando unimos fuerzas y fomentamos nuestra relación».
Una relación, añadió el Rey, «estratégica» que se ha visto también reflejada en la fundación que organiza el congreso y el «magnífico edificio» sobre el que se asienta, que fue, recordó, el pabellón nacional de Marruecos durante la Expo 92, cuando Sevilla «volvió a abrir de nuevo sus puertas al mundo, para dar la bienvenida a todos lo que llegaran para disfrutar nuestra hospitalidad y diversidad y para aprender sobre nuestra cultura».
Así, Don Felipe afirmó que aprecia el esfuerzo que han realizado ambos países desde entonces para mantener, como un hito de honor en Sevilla, el continuo diálogo e intercambio entre las diversas y vastas culturas que ambos países comparten, aunque también con muchos otros países de la región.
El Rey también reivindicó la «vocación mediterránea» de España, que está «sobradamente contrastada», pues ha demostrado en el pasado «su capacidad y voluntad para asumir un papel destacado en los esfuerzos de la comunidad internacional por encontrar soluciones pacíficas y sostenibles a los conflictos y desafíos que persisten en el Mediterréneo y Oriente Medio».
En ese sentido, Don Felipe quiso reafirmar el «inquebrantable compromiso» de España para defender iniciativas que contribuyan a ofrecer respuestas políticas y económicas a los desafíos planteados en la región.
Díaz destaca la «cercanía» del Rey
Por su parte, la presidenta de la Junta destacó en la inauguración la relación de «cercanía» que Felipe VI mantiene con Andalucía «como parte sustancial de la nación española».
Además, Susana Díaz destacó el Mediterráneo como un mar común de cultura y civilización, de la que surgieron las tres grandes religiones monoteístas, pero que en la actualidad se ha convertido en un escenario de «desigualdades lacerantes» y de «negocio de seres humanos», motivados por la diáspora de refugiados que huyen de conflictos armados, que muchos de ellos llegan a las costas andaluzas.
En ese sentido, la presidenta de la Junta destacó la necesidad de que la Unión Europea ponga en marcha políticas comunes, que permitan que el Mediterráneo ofrezca «oportunidades para todos, especialmente a los jóvenes» de ambas orillas.
En ese sentido, confía en que los debates que se generen entre los 3.000 participantes y los más de 500 actos convocados en el Wocmes sirvan para «el intercambio de ideas y de cooperación».